Hoy pretendo enseñarte cómo hacer talco para bebé casero para aplicarlo no sólo en el culito del bebé sino que sirve también en niños y adultos para hidratar ó aliviar piel irritada.
Abordaremos la siguiente información:
- ¿Qué hay de cierto en relacionar el talco con el cáncer?
- Ingredientes de la receta de talco para bebé casero.
- Propiedades de los ingredientes de nuestra receta de talco para bebé casero.
- Elaboración de la receta de polvos talco para bebé natural.
- Importacia de la correcta aplicación.
1.- ¿Qué hay de cierto en relacionar el talco con el cáncer?
Los polvos talcos toman su nombre porque originariamente estaban formados en su mayoría por un mineral que se llama talco.
Este mineral, el talco, proviene de la arcilla, y se extrae de depósitos subterráneos. Pero en estos depósitos subterráneos también se encuentra el asbesto (también conocido como amianto), y a veces sucede que se mezclan las vetas y se produce una contaminación cruzada, y de ahí vienen los problemas.
Resulta que el asbesto ha sido clasificado como un cancerígeno humano reconocido (es decir, sustancia que provoca cáncer) por el Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos (HHS), por la Oficina de Protección Ambiental (EPA) y por la Oficina Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC), según nos cuentan en el Instituto Nacional del Cáncer .
Según el Instituto Nacional del Cáncer la exposición al asbesto puede también causar enfermedades respiratorias que no sean cancerosas.
El Instituto Nacional del Cáncer dice también que para que se produzca alguna de estas enfermedades (cancerosas o no), por la exposición al asbesto, hay que estar expuesto con cierta regularidad al asbesto.
Todo ello nos hace deducir que si usamos el talco que puede llevar vetas de abesto puede provocar todas estas enfermedades, de hecho se denunció a Johnson & Johnson, que tuvo 11.700 demandas por provocar algún tipo de cáncer
Y por una de estas demandas Johnson & Johnson fué condenado a pagar 4.690 millones de dólares a 22 mujeres a las que el talco les provocó cáncer de ovarios. La compañía apeló la sentencia.
Por todo ello, en los años 70, se prohibió la presencia de los asbestos en los polvos de talco, aunque desde entonces sigue envuelto en polémicas sobre sus posibles efectos cancerígenos.
Nosotros vamos a realizar unos polvos talcos sin talco, es decir, que de talco sólo tiene el nombre porque es como popularmente se conoce, pero usaremos otros productos naturales que son inocuos y proporcionan muchos beneficios a nuestra piel.
La mayoría de las marcas comerciales también han eliminado el talco del componente de sus polvos para la piel.
2.- Ingredientes de la receta de talco para bebé casero.
Los ingredientes son:
- Harina de maíz (maicena): 25 grs.
- Arcilla blanca: 25 grs.
- Harina de avena: 25 grs.
- Óxido de zinc (no nano): 25 grs.
- Aceite esencial:
- Si es para bebés menores de dos años no se debe añadir ningún tipo de aceite esencial.
- Para uso de niños mayores de dos años los aceites esenciales más recomendados para ellos son: lavanda, manzanilla ó árbol de té.
- En adultos: el de tu preferencia hasta un máximo de 40 gotas (según la intensidad de aroma preferida). Yo voy a usar aceite esencial de lavanda, 40 gotas.
3.- Propiedades de los ingredientes de nuestra receta de talco para bebé casero.
La harina de maíz (maicena) ayuda a hidratar nuestra piel, es astringente y ayuda a eliminar el exceso de grasa y de humedad, tiene poder antiséptico por lo que es ideal para quemaduras solares y zonas irritadas ó picaduras de mosquitos.
La arcilla blanca la vamos a utilizar porque limpia la piel de impurezas, es seboreguladora, hidratante y además tiene efecto calmante.
La Harina de avena aportará hidratación, tiene efectos calmantes por lo que alivia posibles picores, tiene también efectos antiinflamatorios, alivia quemaduras, y elimina impurezas.
El óxido de zinc tiene múltiples propiedades para nuestra piel, pero en esta ocasión lo vamos a usar porque forma una capa protectora que impide la irritación con la fricción de la ropa.
El aceite esencial de Lavanda además de su aroma nos aportará efecto calmante, ó propiedades antisépticas y antibacterianas. Si quieres saber más sobre las propiedades del aceite esencial de lavanda, pincha sobre el enlace.
4.- Elaboración de la receta de polvos talco para bebé natural.
1.- Primero lavarse bien las manos y desinfectar todo los utensilios que vayamos a utilizar (para ello los lavaremos bien con agua y jabón, luego los rociamos con alcohol y dejaremos evaporar este alcohol). Una vez evaporado y seco todos los utensilios, nos lavaremos las manos y podremos empezar con la elaboración.
2.- Luego nos ponemos una mascarilla facial apta para filtrar el polvo, necesaria cuando manejamos sustancias en polvo y no queremos sufrir de irritación de las vías respiratorias.
3.- A continuación en un recipiente de boca ancha (que puede ser el mismo tarro donde lo vamos a envasar) vamos echando todos los polvos de nuestra receta. Para ayudarnos debemos usar un utensilio de madera ó plástico, porque la arcilla pierde sus propiedades si usamos utensilios de metal.
4.- Cuando tengamos todos los polvos juntos removemos bien con la ayuda de cualquier cuchara ó espátula. Podemos cerrar el tarro y agitarlo y así lo mezclamos sin levantar polvo.
5.- Si no lo vamos a usar en bebés le añadiremos el aceite esencial de nuestra preferencia, con un máximo de 40 gotas. Yo voy a añadirle aceite esencial de lavanda, y le voy a echar el máximo de gotas, 40, porque me gusta que se note bien el aroma.
6.- Volvemos a mover bien para que se integre el aceite esencial con todos los polvos, y ya tendremos elaborados nuestros polvos talco.
Importante: No triturar más el polvo para hacerlo más fino, porque de esa manera sería más volátil, suspendiéndose en el aire más fácilmente, y puede así crear irritación y problemas respiratorios.
5.- Importancia de la correcta aplicación.
No se aconseja añadir los polvos en un tarro de agujeritos tipo salero como los que se usan comercialmente, sino en un tarro de boca ancha.
Y la aplicación no debe de ser para nada espolvoreando la zona a tratar, sino cogiendo un poco en la mano, nos lo resfregamos entre las manos, y a continuación lo ponemos en el culito del bebé ó zona a tratar, retirando el exceso.
La explicación de esto, una vez más, es que no queremos que se volatilice el polvo en el aire y pueda producir irritación ó problemas respiratorios.
Y listo, ya hemos terminado, espero os haya gustado.
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Os espero abajo en comentarios para cualquier duda al respecto, ó para que me contéis que tal os ha ido con la elaboración e impresiones posteriores después de su uso.